En nuestra vida diaria usamos una infinidad de recursos, en ocasiones somos el único usuario de ese recurso (ej. Cepillo de dientes), en otros casos, compartimos esos recursos con otras personas (ej. Las calles y banquetas por donde transitamos todos los días).
Si exploramos los extremos, veríamos que los recursos compartidos funcionan como sistemas acoplados, y cuando los recursos no son compartidos funcionan como sistemas desacoplados. Un ejemplo de los anterior lo podemos ver en un crucero de autos, en el que tienen en común un cuadro central por el pueden y deben circular los automóviles -digamos- que circulan de sur a norte o norte a sur y bajo ciertas reglas (semáforos) dejan de circular y lo hacen los otros auto de este a oeste o viceversa.
Cuando el trafico se va incrementando hasta ser excesivo, la solución extrema con frecuencia es un paso a desnivel, de esta forma los autos dejan de compartir el area central del cruce de calles o avenidas y circulan de manera continua.
Esto es lo que se conoce como «desacoplar» el sistema, lo que implica que los recursos se deben duplicar (en este ejemplo) con un costo adicional a la situación inicial, esperando que el beneficio obtenido sea mayor al costo incurrido.
Algo similar sucede con el uso de automóvil, aunque un auto este en circulación – a lo mucho – un 25% del tiempo disponible (24 horas al día) con frecuencia en una familia de 4 integrantes, pueden haber dos, tres y hasta cuatro autos. Ya que de esa manera al funcionar como recursos NO compartidos, logran maximizar la felxibilidad para los usuarios y laa probabilidad de que un auto este disponible en el momento que lo deseen es muy cercana al 100% y el beneficio de esa flexibilidad se asume absorbe con creces el costo de cada auto adicional.
También podemos obervar que en el momento que existen sistemas acoplados (recursos compartidos) es indispensable contar con un mínimo de reglas para decidir en que momento cada usuario puede hacer uso del recurso compartido.
Lo mismo sucede en las empresas, cuando un mismo recurso, es requerido para cumplir el flujo de varios procesos, lo que implicara que el o los recursos compartidos operen bajo ciertas reglas que busquen maximizar su utilización y rentabilidad de la empresa.
El aspecto clave de todos estos casos, es primero tomar conciencia de que existen los sistemas acoplados y los desacoplados, y que dependiendo de las circustancias, puede convenir cambiar de uno a otro o viceversa.
Los sistemas acoplados tenderán a reducir el costo unitario a costa de perder flexibilidad en la disponibilidad del recurso compartido. Si por ejemplo 5 usuarios se coordinan para hacer uso de un solo recurso clave, en la medida que algunos de estos usuarios requieran mas horas del recurso por día, los conflictos se incrementaran hasta un punto tal, que se justificará adquirir un recurso adicional.
O por el contrario, si 5 usuarios cuenta cada uno con su propio recurso y lo utiliza al dia 4 horas o menos, se podrían aliar y vender 4 recursos y repartir ese ingreso entre los 5 y definir reglas de operacion para usar el unico recurso restante, aumentando el nivel de su utilización.
Si por un momento tuvieramos las perspectiva de un astronauta que desde el espacio ve al planeta tierra, y contara con la capacidad de ver e identificar con precisión los recursos duplicados y ociosos, seguramente nos sorprenderíamos del enorme exceso de recusos (de todo tipo) sub-utilizados. Y no solo eso, sino que los usarios de esos recursos desconocerían, ya sea con quien compartir un recurso en beneficio mutuo o en donde ubicar un recurso similar con tiempo disponible.
Y de esta forma surgen los diferentes modelos de negocio (tipo Uber o Airbnb o los espacios de «Co-working») basados en la economia del «compartir» (sharing economy) que son posibles gracias a que las tecnologías de información facilitan enormemente unir de manera temporal a quienes pueden ofertar un recursos ocioso o demandar el uso de un recurso que requieren para poder satisfacer una necesidad temporal o permanente.
Otras aplicaciones de estos conceptos, los podemos ver en los, parques públicos, el transporte escolar, el transporte público y los sistemas de alumbrado público o las plantas municipales potabilizadoras de agua, en los que se atiende a un gran volumen de usuarios con recursos compartidos que dificilmente podrían ser adquiridos por un solo usuario.
En la búsqueda de alternativas para mejorar la productividad y rentabilidad de sus organizaciones, revisen sus procesos y validen si conviene que operen bajo los principios de los sistemas acoplados o desacoplados.
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